Si yo se...!!! de nuevo fuiste de paseo al centro comercial
Y de nuevo viste esa ropa que querias comprar.
No tienes dinero ni tampoco estaba en tu presupuesto de ese mes. Sin embargo decides pagarla con tu tarjeta de crédito pensando: Luego me preocuparé como saldar esa deuda en la tarjeta.
Durante meses incluso años, notas que por más que pagas la tarjeta de crédito esta se queda igual y no importa cuanto le abones al mínimo es que la mendiga tarjeta se convirtio en la devoradora de tus finanzas y de tus metas.